El consorcio Unidos por el Canal, liderado por la española Sacyr Vallehermoso, ha obtenido la mayor puntuación tanto en la propuesta económica como en la técnica para la licitación de la ampliación del Canal de Panamá. Junto a la compañía presidida por Luis del Rivero, participan la italiana Impregilo, la belga Juan de Nul y la panameña Constructora Urbana.
La Autoridad del Canal anunció ayer que el consorcio integrado por Sacyr ha obtenido la mayor nota en cuanto al diseño del proyecto, puntuación que suponía el 55% en la decisión final. Minutos después, se procedió a abrir los sobres con las tres propuestas económicas que competían y que habían estado custodiadas en el Banco Nacional de Panamá desde marzo. El precio representaba el 45% en la elección final del adjudicatario.
Unidos por el Canal ha sido el grupo que ha presentado la oferta más barata, valorada en 3.120 millones de dólares (2.245 millones de euros), un poco inferior a los 3.200 millones de dólares que se habían marcado como límite los promotores.
El segundo grupo de aspirantes, en el participaban Acciona, FCC y ACS, además de la alemana Hochtief y la mexicana Ica, habían diseñado un proyecto más ambicioso y también más caro, de 5.548 millones de dólares (3.991 millones de euros), frente a los 4.185 millones de dólares (3.010 millones de euros) de la propuesta del tercer grupo, integrado por la americana Betchel y las japonesas Mitsubishi y Tasei.
Luis del Rivero, que se enteró de la noticia durante su participación en el Encuentro Nacional del Sector de la Construcción, celebrado ayer en Madrid, aseguró que la adjudicación «es algo bueno para la ingeniería y para las empresas españolas». El anuncio de la adjudicación convirtió al presidente de Sacyr en el centro de atención de la jornada, en la que también participaban los responsables de otras constructoras que también pujaban por el contrato panameño.
Durante la clausura del encuentro, el ministro de Fomento, José Blanco, aprovechó para felicitar tanto a Sacyr como a su presidente: «Nos enorgullece muchísimo el papel que las empresas constructoras españolas están jugando en el mundo».
Duplicar el tráfico
El proyecto consistirá en la construcción del tercer juego de esclusas que unen los océanos Atlántico y Pacífico a través del Canal de Panamá, por donde pasan alrededor de 17.000 buques al año, es decir, aproximadamente el 5% del comercio mundial.
Además de contar con mecanismos de apertura más modernos, las nuevas esclusas serán más grandes para permitir el paso de los cargueros modernos, cuyas dimensiones les impiden utilizar las actuales esclusas, construidas hace casi un siglo.
Dentro de un mes, se adjudicará el último contrato de excavación del programa, considerado el segundo más importante de la ampliación. El objetivo es construir un cauce de acceso al Pacífico de 6,1 kilómetros de longitud hasta la parte más estrecha del Canal, conocida como Corte Culebra.
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